Blog Post

Este Septiembre

Trinidad Armenteros • sept 18, 2020

Este septiembre se parece a otros septiembres, cómo todos los años nos ha traído las vueltas a las rutinas, trabajo, estudios, deporte, aficiones, nuevos proyectos personales…tras la pausa del verano, con el deseo de que se parezca lo más posible a nuestras rutinas de siempre.


Una pausa la de este verano que ha sido en muchos aspectos menos pausa que otros años, la posibilidad de desconectar, descansar y relajarnos ha sido más difícil, con la mirada puesta en la evolución de la pandemia y en cómo estaría la situación a la vuelta y a la vez intentando vivir un verano que se pareciera a lo que es un verano.


Si otros años ya nos ha costado incorporarnos a nuestra rutina porqué nos resulta tediosa o estresante, en esta ocasión, le añadimos la incertidumbre de no saber cómo se desarrollará, cuánto tiempo durará la organización actual de nuestro día a día, si podremos continuar o finalizar lo iniciado.


¿Y si dejáramos de intentar controlar y llevar toda nuestra rutina a nuestro espacio conocido? ¿Y si no intentaremos vivir este septiembre como otros septiembres?


Vivir el presente preocupados por lo que sucederá mañana, nos puede llevar a padecer ansiedad anticipatoria, provocando un malestar añadido en nuestro presente a la propia dificultad del momento que vivimos. Nos puede paralizar a la hora de tomar decisiones sobre el futuro más inmediato.


Intentar vivir este momento como lo hemos vivido otras veces obviando las circunstancias de la situación que vivimos, nos puede llevar a una frustración constante.


En la incertidumbre de mañana, nos queda el presente de hoy. Nuestras decisiones tendrán que estar ceñidas en lo que es posible hoy, no angustiarnos por lo que pasará mañana, planificar el presente y el futuro más cercano simplificando, con una estructura liviana que sea fácil de modificar y adaptar a los posibles cambios que puedan suceder.


Planificar el día a día sin grandes expectativas, con actividades sencillas de realizar, buscando momentos que nos permitan desestresarnos, bailar, pasear, ejercicio físico o alguna actividad manual. Tener unas buenas rutinas de descanso y sueño, cuidar nuestra alimentación. Y antes los imprevistos, centrarnos en la búsqueda de una solución y no en cómo debería ser o en lo que estamos perdiendo.




Imagen de hudsoncrafted en Pixabay

Share by: